Frente
a los allanamientos de domicilios y estudios de miembros de la Liga
Obrera Internacionalista - Democracia Obrera, acusándolos de
estafas, no nos cabe ninguna duda de que se ha desatado una injusta
campaña de persecución estatal-judicial, una campaña de tipo
fascista, contra los compañeros y su partido.
Se
trata de la misma justicia burguesa que no se ha preocupado por
enjuiciar a los responsables materiales e intelectuales de los más
de 30 asesinatos, previos y posteriores a las Jornadas del 19-20 de
diciembre del 2001; que no ha investigados a los responsables
intelectuales de los asesinatos de Kosteki y Santillan, perpetrados
por la policía bonaerense y el gobierno peronista de Duhalde; que no
ha esclarecido la desaparición de Julio López, testigo de las
aberraciones criminales de los militares en el poder; justicia que no
ha querido investigar el caso de Luciano Arruga, joven muerto por la
policía por negarse a “trabajar” para éstos, policías que
gracias a esta justicia siguen en actividad; o no haber esclarecido
el caso de Daniel Solano, delegado agrícola asesinado por la policía
por negarse a traicionar a sus compañeros. Se
trata de la misma justicia que ha legitimado los crímenes del
genocida Estado de Israel, al cuál no se lo puede criticar, porque
toda crítica de su existencia criminal es imputada como anti-semita.
Se trata de la misma “justicia” de un largo etcétera de
corrupción, crímenes apañados y aberraciones jurídicas.
Sí,
ésta justicia de los patrones, empresarios o burgueses, que se
enriquece -o mira para para otro lado- junto a los funcionarios y
políticos patronales que han quintuplicado, sextuplicado o incluso
aumentado diez veces su patrimonio desde que están en el gobierno; o
jueces que a sabiendas usaban datos tomados de forma ilegal del
Proyecto X, de la señora Ministra de Seguridad Nilda Garre, para
encarcelar compañeros. Sí, ésta justicia es la que allana
domicilios de militantes y estudios de abogados compañeros de la
LOI-DO, en algunos casos sin la presencia de los imputados y en otros
casos deteniéndolos en la vía pública como vulgares delincuentes,
con testigos, supuestamente transeúntes, de los que no se conoce su
imparcialidad, y que por otra parte no podrían acreditar
fehacientemente si, por ejemplo, los papeles o datos obtenidos, en
dichos allanamientos, y los archivos de textos de las PC's, son
verdaderos o fueron fraguados una vez extraídos. ¿Es que alguien,
ya no un luchador por el socialismo, sino alguien en su sano juicio
puede confiar en “el brazo de la justicia” llamado la
policía argentina?
Desde
ya (y teniendo en cuenta los pactos internacionales con los órganos
imperialistas del gobierno de la señora presidenta Cristina
Fernández de Kirchner, que han llevado a la votación de la infame
Ley anti-terrorista; así como la reputación de ésta justicia, que
en estos últimos diez años en lo que fue más efectiva es en
procesar a más de 5000 luchadores, con la sola intención de
perjudicar la lucha de los trabajadores, de los aborígenes y de los
pobres que reclaman algo de justicia social), en este marco no nos
cabe ninguna duda que las acusaciones vertidas contra los miembros de
la LOI-DO son enteramente falsas.
A
los compañeros injustamente acusados, a los miembros de la LOI-DO y
sus partidos o grupos internacionalmente solidarios, desde la LCT les
decimos: Desconociendo los pormenores del caso, y más allá de
las grandes diferencias políticas, teóricas y metodológicas que
nos separan, pueden contar con nosotros y nuestras modestas fuerzas
para cualquier actividad a los efectos de luchar contra este artero
ataque burgués.
Fraternalmente,
Liga Comunista de los Trabajadores
07-10-2012
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